La habitación tenía un balcón hermoso que daba hacia un jardín, lo que fue perfecto para relajarse. La ubicación era ideal para disfrutar de la variedad de comidas en el Naschmarkt. Sin embargo, el lavatorio del baño era un poco pequeño y la carta del restaurante podría mejorar. En general, una buena experiencia para una corta estancia.

Recomiendo probar las cócteles únicos en el bar, valen la pena. el ambiente es muy agradable.

El desayuno es variado y delicioso.

Lamentablemente, la carta del restaurante era escueta y la comida no alcanzó mis expectativas. Además, la habitación estaba un poco descuidada y noté algunos detalles que necesitaban atención. Aunque el personal intentó ayudar, la experiencia general no fue la que esperaba.

1) Desayuno variado
2) Jardín hermoso
3) Atención excepcional

1) Baño pequeño
2) Aire acondicionado ruidoso
3) Memoria insuficiente de las solicitudes

Ubicación ideal cerca del metro.

La ubicación era excelente, muy cerca del Naschmarkt, donde pude disfrutar de la variedad de comidas locales. La habitación era moderna y bien equipada, con un delicioso desayuno que me ayudó a comenzar el día con energía. Me gustó especialmente el balcón, que daba hacia un jardín lleno de verde, perfecto para relajarme después de un día explorando la ciudad. Aunque el lavatorio era un poco pequeño, la experiencia general fue realmente buena.

La habitación tenía un hermoso balcón que daba al jardín, perfecto para relajarse. La ubicación es inmejorable, a solo dos paradas de metro del centro, lo que facilite explorar la ciudad. El desayuno es variado y muy bueno, aunque el lavatorio del baño es pequeño y no ofrece mucho espacio. La calefacción funcionó a la perfección, pero el tamaño de la habitación puede resultar un poco justo para algunos. La atención del personal fue excelente, siempre dispuestos a ayudar con recomendaciones.

Es un hotel encantador con un jardín sereno y acceso fácil a diversas actividades culturales, y la atención al detalle del personal fue impresionante.

Pareja buscando un refugio perfecto

Tuvimos una experiencia increíble, el personal nos sorprendió con un trato excepcional. La decoración del lugar está pensada al detalle, entras y te sientes como en casa, ese aroma es inconfundible, además, el cuarto tenía un balcón encantador donde podíamos relajarnos con una bebida.

No fue barato, pero totalmente aceptable, considerando lo que ofrece.

la excelencia del personal y el asombroso desayuno harán de tu estancia una experiencia inolvidable

El hotel Indigo Viena es un verdadero oasis en la ciudad. La atención del personal es excepcional, siempre con una sonrisa y dispuestos a ayudar. El desayuno es delicioso, con opciones variadas y de alta calidad. Las habitaciones son modernas, amplias y limpias, ideales para relajarse después de un día de exploración. Además, su ubicación es perfecta, justo al lado de la estación de metro, lo que facilita moverse por la ciudad. Sin duda, una experiencia magnífica.

La habitación era espaciosa y contaba con una cama comodísima, sábanas suaves y una decoración moderna que te hacía sentir como en casa. Además, el bar del hotel era encantador, invitando a relajarse al final del día. La ubicación es ideal, justo al lado de la estación de metro, facilitando el acceso a los lugares turísticos más importantes de la ciudad.

El lavatorio del baño era pequeño y un poco incómodo.

recomendaría el lugar sin duda alguna for una pausa de fin de semana

Habitación moderna, baño bien equipado, el jardín es hermoso con un balcón encantador donde se puede disfrutar del aire fresco. además, el hotel ofrece un bar y restaurante cómodos para relajarse después de un día de exploración, y está a solo 17 km del aeropuerto, lo que facilita el acceso al transporte.

Todo ha sido fantástico

Las habitaciones estaban tan bien equipadas que me sentí como en un spa de lujo, con un minibar que parecía un cofre del tesoro y una televisión de pantalla plana que era más grande que mi primera computadora. La terraza del hotel era un lugar perfecto para contemplar la vibrante vida del Naschmarkt, con más restaurantes únicos que opciones en un menú de buffet.

Algunos ruidos externos

el baño es un poco pequeño, pero la habitación tiene un hermoso balcón con vistas al jardín. el bar ofrece una buena variedad de cócteles 🍹 y el personal es muy amable! la decoración es moderna y atractiva.